Me pongo y escribo en primera persona sobre mis vivencias y sobre mis reflexiones. A veces me da por tocar temas sobre los que tengo una opinión. Esto me hace informarme más, intentar conocer otras visiones. El resultado es que mi opinión se desplace desde su estado inicial. Está bien. Me gusta sentirme flexible.
Electroshock. Exorcismo.
Hoy tiro la toalla. Nos vemos, mente abierta de pacotilla. Me falta estómago para digerir lo que encuentro en Internet y para recordar lo que me han contado.
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De modo que celebro la entrada (o el escrito, o el post, o como se le quiera llamar) número 200 en este blog con la confesión de mi ignorancia sobre ciertos temas como los electroshocks o los exorcismos en salud mental en la actualidad. Quisiera saber más. Saber mejor. O no. A lo mejor tengo que esperar a tener mejor estómago para acercarme a ciertas realidades.
Dicen que tengo trastorno bipolar 
Estoy de acuerdo, prefiero la ignorancia, a experimentar el diabólico electro shock. Es preferible ser puntual y regular en tu medicación a pasar por esa experiencia. No la he pasado, y espero nunca hacerlo. Aunque hay muchos procedimientos médicos igualmente indeseables, pero a veces necesarios.
Saludos y que nunca pasemos por ello
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